Chile se encuentra ante un momento definitorio en materia laboral y formativa. Con un nuevo gobierno en puerta y propuestas contrastantes de los candidatos José Antonio Kast y Jeannet Jara, los chilenos enfrentan la imperiosa necesidad de prepararse para un mercado laboral en rápida evolución. La empleabilidad ya no depende únicamente de la experiencia previa o los títulos académicos, sino de la capacidad de adaptación y aprendizaje continuo.
La realidad laboral chilena muestra contradicciones significativas. Según datos del INE, mientras la tasa de desempleo se mantiene en niveles preocupantes, especialmente entre jóvenes y mujeres, existe simultáneamente una escasez de talento en sectores tecnológicos y de la nueva economía. Esta paradoja revela un desfase entre la formación disponible y las necesidades reales del mercado.
Las Propuestas en Contraste: Dos Visiones de Empleabilidad
Visión de José Antonio Kast: Libre Mercato y Capacitación Empresarial
El candidato de Republicanos propone un modelo donde la capacitación responde principalmente a las demandas del sector privado. Su programa enfatiza:
– Créditos fiscales a empresas que inviertan en capacitación laboral
– Programas de aprendices vinculados a subsidios estatales
– Focalización en sectores tradicionales como minería, construcción y agricultura
– Flexibilización laboral para facilitar la capacitación en el trabajo
Expertos en formación laboral advierten que este modelo, aunque práctico para necesidades inmediatas, podría descuidar la formación en competencias transversales y sectores emergentes.
Visión de Jeannet Jara: Estado Facilitador y Formación Integral
La candidata de Apruebo Dignidad propone un enfoque más intervencionista:
– Sistema Nacional de Capacitación gratuito y universal
– Fomento de competencias digitales y ecológicas
– Programas específicos para mujeres, jóvenes y adultos mayores
– Corresponsabilidad empresarial en la formación continua
Especialistas en políticas públicas destacan que esta aproximación, aunque más inclusiva, requiere una implementación cuidadosa para evitar burocratización y asegurar su pertinencia con el mercado laboral real.
La Cuarta Revolución Industrial: Un Contexto que No Espera
Independientemente del gobierno de turno, Chile enfrenta transformaciones estructurales que redefinen el concepto de empleabilidad:
– La automatización afectará el 52% de los empleos actuales según CORFO
– Las carreras técnicas del futuro requerirán competencias digitales básicas
– La economía verde generará nuevas ocupaciones aún no masificadas en la formación tradicional
Sectores Estratégicos para la Capacitación Inmediata
Transformación Digital
Desde manejo de datos básicos hasta programación avanzada, las competencias digitales se han vuelto transversales a todos los sectores productivos. Cursos en análisis de datos, marketing digital y ciberseguridad muestran tasas de empleabilidad sobre el 85%.
Economía Verde y Sostenibilidad
La transición energética y los compromisos ambientales de Chile abren oportunidades en:
– Gestión de residuos y economía circular
– Energías renovables
– Eficiencia energética
– Agricultura sostenible
Cuidados y Bienestar
El envejecimiento poblacional y la crisis de salud mental crean demanda en:
– Atención geriátrica
– Soporte psicosocial
– Terapias complementarias
Recomendaciones para la Próxima Administración en el Rol de los Trabajadores: Aprendizaje Permanente
En este escenario de incertidumbre, la responsabilidad individual en la capacitación se vuelve crucial. Los trabajadores chilenos deben:
– Desarrollar una mentalidad de aprendizaje continuo
– Identificar tendencias sectoriales
– Construir redes profesionales diversas
– Mantener actualizado su portafolio de habilidades
La empleabilidad en Chile trasciende los ciclos políticos. Requiere una visión estratégica compartida entre gobierno, empresas y ciudadanos. Mientras los candidatos presentan sus propuestas, los chilenos tienen la palabra mediante su preparación para los empleos del futuro.
La verdadera seguridad laboral ya no reside en tener un empleo estable, sino en mantener habilidades relevantes y adaptables. En un mundo donde el conocimiento se duplica cada dos años, la capacitación continua deja de ser una opción para convertirse en imperativo nacional.


